12/10/2013

En el fiordo de Uummannaq


Tara llega a Groenlandia. F.Aurat/Tara Expéditions

Desde la tarde del viernes, después de cruzar sin problemas el Mar de Baffin, la tripulación disfruta de las bellezas del fiordo de Uummannaq, Groenlandia. En este fiordo que se abre sobre la costa oeste de la isla gigante y helada, los científicos realizan este sábado una estación larga, con un muestreo en superficie y otro a una profundidad de 400 metros.
 
En el centro de un escenario rodeado de altas montañas cubiertas de nieve, se encuentra la isla de Uummannaq, de una superficie de 12km2. Su punto más alto es un pico rocoso de 1175 metros. La isla debe su nombre a su forma, la de un corazón, o sea uummannaq en groenlandés.
Este es otro de esos lugares que nos hacen amar la vida y medir la suerte de poder estar aquí. Uno desea compartir eso con sus seres queridos, los que no pueden viajar para llenarse el alma de este regalo de la naturaleza, que entrega mucho más que un simple placer visual. Los catorce a bordo han sentido esta dimensión desde las primeras millas recorridas en el seno de este estuche de joya. Colores, icebergs esculpidos frutos de la genialidad de un artista con una creatividad insaciable, crestas nevadas y acantilados abruptos que se tiñen de rosado al atardecer.

Luego de una buena noche pasada a la deriva entre los icebergs, el equipo científico ha regresado a la tarea bajo un sol espléndido. El fiordo está lleno de tesoros ocultos de diversidad que Lars Stemmann tiene la intención de caracterizar. Empezando por unas misteriosas “brines”, unas aguas de superficie muy frías, remanentes del invierno anterior, que fluyen hasta encontrar agua de misma densidad.

Las múltiples inmersiones de la roseta han permitido localizarles entre 100 y 120 metros a temperaturas de 0,8 ºC. El interés científico es de identificar los microorganismos que viven en esas  "brines”. ¿Serán estas salmueras un hábitat particular para el plancton? Esta es una de las preguntas de la presente estación  nº 206.

Nos quedaremos en modalidad de ciencia en el fiordo hasta mañana por la tarde, a pocas millas de Uummannaq. Algunos centenares de casas de madera de todos los colores están agarrados de esta roca. 1400 Kalaallit, los Inuit de Groenlandia o Kalaallit Nunaat, viven aquí con algunos inmigrantes daneses. Es un paraíso para los trineos tirados por perros y se dice que los mejores pilotos del país viven en la bahía de Uummannaq.

En el fondo de esta majestuosa bahía se erige el Qarajaq, uno de los glaciares más rápidos del mundo. El progresa de más de 7 kilómetros por año y produce la mayor parte de los icebergs que estamos admirando desde hace veinticuatro horas.

Vincent Hilaire